botánico

IRIS

Nombre de la flor iris, que simboliza esperanza y comunicación. En la mitología griega, 'Iris' era la diosa del arco iris y la mensajera de los dioses, especialmente de Hera. Se creía que Iris viajaba entre el cielo y la tierra a través del arco iris, llevando mensajes divinos. Por esta razón, su nombre pasó a asociarse con los colores brillantes y variados del arco iris. Por otro lado, La flor del género Iris fue nombrada así debido a sus colores vibrantes, que evocan los tonos del arco iris. Al igual que el fenómeno meteorológico, la flor iris puede presentar una amplia gama de colores, desde púrpura y azul hasta amarillo y blanco, lo que refuerza esta conexión visual. En ese sentido, la parte coloreada del ojo también se llama 'iris' debido a su diversidad de tonalidades, similar a los colores del arco iris

VIOLETA

NiñaLatino

Derivado de la flor violeta, que representa modestia y fidelidad, de color púrpura. Simboliza la delicadeza y la modestia. Representa la belleza sutil y la elegancia natural

CAMILA

NiñaLatino

Nombre inspirado en la +CAMELIA+, una flor ornamental de gran belleza

YOLANDA

NiñaGermánico

Nombre de raíz germánica, derivado de Wioland, donde 'wil' significa 'riqueza' o 'voluntad' y 'land' se traduce como 'tierra'. Sin embargo, en la Edad Media, el nombre comenzó a asociarse con la flor de viola debido a su similitud fonética y semántica. Aunque originalmente no tenía una conexión floral, con el tiempo el nombre Yolanda se interpretó como 'la flor de la +VIOLETA+' o 'violeta', especialmente en contextos románticos y literarios. Este vínculo con las flores ayudó a popularizar el nombre en la literatura y entre la nobleza medieval

ROSA

NiñaLatino

Derivado de la flor del rosal, simboliza amor y belleza

MARGARITA

NiñaGriego

Nombre de la flor margarita, asociado a la simplicidad y alegría

VERÓNICA

NiñaGriego-Latino

Proviene del nombre griego Berenice (Phereníke), que significa 'portadora de la victoria' (pherein = portar, nike = victoria). Este nombre fue adaptado al latín como Veronica, cambiando ligeramente su forma. En el cristianismo, Santa Verónica es una figura asociada con la Pasión de Cristo. Según la tradición, fue la mujer que ofreció su velo para secar el rostro de Jesús mientras llevaba la cruz. Como recompensa, la imagen de su rostro quedó milagrosamente impresa en el paño. En ese contexto, el nombre se interpreta como 'imagen verdadera', derivado del latín medieval vera ('verdadera') y el griego eikon ('imagen'). Aunque esta etimología es probablemente un desarrollo popular basado en la devoción religiosa, no en la raíz original del nombre. Por otro lado, la planta verónica (del género Veronica) lleva este nombre debido a la delicadeza de sus flores y posiblemente en honor a Santa Verónica. Es común que nombres de santos se asocien con flora como homenaje en la botánica